Hace mucho tiempo no había un escenario tan
adecuado y preciso para jugar una final de Copa Santander Libertadores. Primero,
el lugar. El Estadio Centenario de Montevideo, es la plaza futbolera donde se
han disputado más partidos de esta competición.
Segundo, Peñarol, es el mejor equipo de América
del Sur en el siglo XX, de acuerdo a la Federación de Historia y Estadísticas
(IFFHS), fruto de ello, en la parte
trasera del cuello de la camiseta del equipo uruguayo están bordadas en letras
doradas las palabras: Campéon del Siglo. Además, disputa con ésta su décima
final, convirtiéndose en el equipo que más veces ha jugado esta instancia en la
historia.
Santos no llegaba a una final desde 2003, cuando
perdió contra el poderoso Boca Juniors de Bianchi y desde el bicampeonato del
62 y 63 no logra el título. En su primera final, le ganó precisamente a
Peñarol.
Por estos y muchos más condimentos era una final
soñada. Las hinchadas respondieron en la tribuna. Los locales vendieron cerca
de 63000 boletas y armaron un marco espectacular con bengalas, luces y banderas
que convirtieron al Centenario en una olla. Los brasileros, algo apagados,
llenaron cerca de 3000 espacios, por lo que su equipo no se sintió tan solo
ante el hermoso espectáculo de la salida de Peñarol.
En el campo se vivió un partido intenso de
principio a fin, con buen fútbol, sobre todo del lado de Santos y muy limpio,
si se tiene en cuenta la actitud guerrera de los uruguayos, que a veces suelen
sobrepasarse.
Al inicio, el local tomó las riendas del partido
y con mucha paciencia buscaba penetrar la defensa rival. El campo estaba muy
resbaladizo y provocaba acciones imprecisas en ambos bandos.
Santos reaccionó y durante 15 minutos del primer
tiempo fue superior, generó opciones claras nacidas en las genialidades de
Neymar y que exigieron al arquero Sosa.
Peñarol respondió y en los pies de Darío
Rodríguez tuvo la más clara, al final del primer tiempo, pero su remate se fue
un poco desviado. El primer tiempo concluyó con amago de bronca entre Rodríguez
y Neymar que no pasó a mayores.
Segundo tiempo
Santos salió a proponer y en los pies de Zé
Eduardo tuvo la opción más precisa para abrir el marcador, cuando recibe en el
área y Sosa le ataja con un costado de su cuerpo el remate.
Santos manejaba mejor el balón, Peñarol era
impreciso y los movimientos de desmarque y de asociación entre Martinuccio y
Olivera ya no se veían. Parecía que el gol del equipo brasilero era inminente.
Sin embargo, Peñarol manejó bien su defensa y
logró controlar el momento inspirado de Neymar y sus compañeros. Luego,
llegaría la reacción del “Manya” sobre todo por el ingreso de Estoyanoff, quien
jugó por la banda derecha y complicó mucho a la defensa de Santos,
devolviéndole domino al equipo uruguayo.
![]() |
| Foto:golgolgol.net |
Peñarol tendría opciones importantes con
Martinucco, Olivera y un gol anulado a Alonso en los minutos finales, por
posición fuera de juego. Aunque la decisión levantó polémicas, sobre todo del
técnico Aguirre, el fuera de lugar existió y en terminos generales, la terna
arbitral no tivo inconvenientes.
El partido conluyó, y la serie sigue abierta. En
Sao Paulo, Santos es muy fuerte, pero Peñarol ha superado rivales muy díficiles
en esta edición y sus mejores partidos fueron de visitante, adjetivo que se
pone en duda cuando se habla del “Carbonero”, el club de mejor entradas durante
la copa y cuyos hinchas anunciaron la presencia de cerca de 20 mil simpatizantes
en Brasil, 10 mil en el estadio y 10 mil por fuera, listos para festejar en
caso de ganar el título.
Por: Juan Felipe Quiceno Cárdenas

No hay comentarios:
Publicar un comentario